El valor unitario del flete internacional alcanzó en noviembre de 2024 un promedio de 132,5 dólares por tonelada, un aumento del 26,9% en comparación con el registrado el mismo mes del año anterior (104,4 dólares). Sin embargo, esta cifra todavía se ubica un 21,8% por debajo de los niveles registrados en noviembre de 2022, cuando alcanzó los 169,5 dólares. Estos datos provienen del informe mensual del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), que detalla los cambios en los costos logísticos internacionales para la economía argentina.El informe también revela que el 78,4% de los fletes tuvo origen en cuatro zonas económicas principales: China, Mercosur, Unión Europea y USMCA (Estados Unidos, México y Canadá). En este contexto, China mostró un incremento significativo del 96,3% en el valor unitario de sus fletes respecto al año anterior, mientras que el Mercosur reflejó una disminución del 13,4% en el mismo periodo.Incrementos en zonas económicas clavesLos costos de fletes provenientes de China registraron una fuerte alza, destacando un comportamiento opuesto al de otras regiones. En contraste, el Mercosur, que representa el 23,6% del volumen total de fletes, experimentó una caída en sus costos unitarios, posiblemente debido a factores como la optimización de rutas y acuerdos logísticos bilaterales. La Unión Europea, que participa con un porcentaje menor, mantuvo costos más estables, mientras que los costos de la región USMCA mostraron ligeras variaciones, reflejando una dinámica de recuperación económica parcial.El análisis por zonas seleccionadas revela un impacto diferenciado de los costos logísticos en la balanza comercial argentina. La estabilidad relativa de las importaciones desde el Mercosur y su costo decreciente han permitido un saldo comercial positivo acumulado durante 2024, mientras que el incremento de costos desde China podría estar ligado al aumento en las importaciones de bienes de alta demanda tecnológica y energética.INDEC: saldo comercial positivoEl informe del INDEC destacó que, durante noviembre de 2024, las exportaciones argentinas crecieron un 31,6% en términos interanuales, impulsadas principalmente por un aumento en las cantidades exportadas (+35,5%), mientras que los precios descendieron un 2,8%. En contraste, las importaciones cayeron un 4,3%, con una reducción del 3,9% en los precios y una leve baja del 0,2% en las cantidades. Este comportamiento resultó en un superávit comercial de 1.234 millones de dólares, marcando 12 meses consecutivos con saldo positivo en la balanza comercial.Entre los principales sectores exportadores, se destacaron los productos primarios (PP), con un crecimiento del 56,9% en valor, mientras que las manufacturas de origen agropecuario (MOA) también tuvieron un alza destacada del 55,1%. Por el contrario, el rubro de combustibles y energía (CyE) mostró una contracción del 10,2%, reflejando tensiones específicas en este segmento.A nivel importaciones, el informe subrayó el crecimiento notable en bienes de consumo (+11,1%) y vehículos automotores de pasajeros (+393,5%), aunque con caídas significativas en combustibles y lubricantes (-67,6%) y bienes intermedios (-13,4%).El INDEC también informó una mejora en los términos del intercambio, con una ganancia neta de 74 millones de dólares en noviembre. Este resultado refleja que, pese a la baja en los precios de exportación, la caída más acentuada en los precios de las importaciones permitió al país obtener más bienes por cada unidad exportada.Contexto histórico y proyeccionesEn comparación con los niveles de noviembre de 2022, el descenso generalizado de los costos de flete refleja una mejora en la eficiencia de las cadenas logísticas globales y una disminución de las presiones inflacionarias internacionales en el sector transporte. Pese a ello, el aumento en 2024 alerta sobre la posibilidad de una reactivación de tensiones en los costos logísticos para el comercio exterior argentino.El reporte del INDEC también señala que este incremento afecta principalmente a sectores clave de las importaciones, como bienes de capital y bienes intermedios. Estos rubros, fundamentales para la producción local, podrían enfrentar mayores desafíos en términos de competitividad si la tendencia al alza en costos persiste en los próximos meses.El comportamiento de los costos logísticos continuará siendo un factor central para las proyecciones comerciales en 2025, especialmente en un contexto donde los acuerdos regionales y las políticas de transporte podrían jugar un rol crucial en la mitigación de estas alzas.