El patrullero de altura ‘Infanta Cristina’ (P-77), con base en Cartagena (Murcia), realizará su última navegación entre el 5 y el 20 de septiembre, recalando en los puertos de Málaga, la Escuela Naval Militar (Marín) y Alicante. La Armada tiene previsto finalizar la vida operativa de este buque el próximo 30 de septiembre, tras 43 años de servicio.
Durante la navegación se llevarán a cabo diversos actos y ceremonias, embarcarán autoridades y se podrán realizar las últimas visitas a bordo, como acto de homenaje a los más de 1.500 marinos que han formado parte de las dotaciones a lo largo de las cuatro décadas en las que el patrullero ha servido a España. Así, en el primer tránsito embarcará el Almirante de Acción Marítima, vicealmirante Alfonso Delgado Moreno.
El buque atracará en el puerto de Málaga entre el 6 y el 8 de septiembre. El día 7 de septiembre se realizará una jornada de puertas abiertas en horario de 10.00 a 13.00 y de 16.00 a 20.00 horas, según han informado fuentes de la Armada en un comunicado.
La segunda escala será en la Escuela Naval Militar de Marín, del día 11 al 13 de septiembre. La tercera y última escala será en el puerto de Alicante del 18 al 20 de septiembre, donde se realizarán jornadas de puertas abiertas los días 18, de 16.00 a 19.30, y 19, de 10.00 a 13.00 horas.
El patrullero ‘Infanta Cristina’ fue concebido inicialmente como corbeta, siendo la cuarta de la clase ‘Descubierta’. Fue construido por la Empresa Nacional Bazán (en la actualidad Navantia) en Cartagena y entregado a la Armada el 24 de noviembre de 1980 con la numeral F-34.
Entre septiembre de 2004 y junio de 2005 se procedió a su transformación como patrullero de altura, cambiando su numeral a P-77. Está encuadrado en el Mando de las Unidades de Acción Marítima en Cartagena (MARCART), dentro de la Fuerza de Acción Marítima (FAM).
El buque ha recorrido 630.000 millas náuticas, distancia que equivale, aproximadamente, a 28 vueltas al mundo. Ha visitado 87 puertos diferentes, entre nacionales y extranjeros, sirviendo un total de 29 comandantes y más de 1.500 marinos, entre oficiales, suboficiales y marinería, tanto profesional como de reemplazo.
Como corbeta participó en numerosos ejercicios nacionales, además de albergar en varias ocasiones el Crucero de Instrucción de fin de curso de los caballeros guardiamarinas.
Formó parte de agrupaciones internacionales de la OTAN, participando activamente en la guerra del Golfo, como parte de la Fuerza Multinacional de Intercepción del Mar Rojo durante el bloqueo naval impuesto por la ONU. También participó en las operaciones de embargo llevadas a cabo en el Adriático durante el conflicto de la antigua Yugoslavia.
Como patrullero ha participado en la Operación ‘Unifil’ en el Líbano, la Operación ‘Atalanta’ como parte de Eunavfor para la lucha contra la piratería en Somalia, y la misión de Seguridad Cooperativa que llevan a cabo las Fuerzas Armadas en el Golfo de Guinea como apoyo a la Acción Exterior del Estado.
Desde la creación en 2013 del Mando Operativo Marítimo, el buque ha realizado 44 misiones de seguridad marítima, contribuyendo al control de los espacios de soberanía e interés nacional y mejorando el conocimiento del entorno marítimo gracias a sus más de 550 días de mar. Durante estas misiones ha colaborado y apoyado activamente a otros organismos públicos como SASEMAR, DAVA o Guardia Civil, en el control del tráfico marítimo, búsqueda y rescate de náufragos, vigilancia de pesca y lucha contra el narcotráfico.
El patrullero está integrado en la Fuerza de Acción Marítima (FAM), cuya flota está formada por el conjunto de unidades que tienen por cometido principal prepararse para proteger los intereses marítimos nacionales y el control de los espacios marítimos de soberanía e interés nacional.
Así, se encarga, con un enfoque integral, de asegurar la cooperación permanente con los diversos organismos de la Administración con competencias en el ámbito marítimo, lo que constituye la contribución de la Armada a la Acción del Estado en la Mar.