En plena discusión técnica en Buenos Aires entre el Gobierno y un grupo de funcionarios técnicos del FMI, el Poder Ejecutivo deberá pagar en los próximos días un nuevo vencimiento de intereses con el organismo, lo que tendrá impacto en reservas en un contexto de caída en las arcas internacionales del Banco Central, que perdió casi USD 550 millones en la última semana.El staff técnico del Fondo Monetario permaneció durante el fin de semana con reuniones previstas con los funcionarios del equipo económico. Al cierre de esta nota, ni desde el Gobierno ni desde el organismo confirmaron a Infobae si la misión terminó este domingo, como se preveía, o si continuará durante las próximas horas. Por lo pronto, a diferencia de otras visitas técnicas, no hubo un comunicado oficial del FMI sobre los avances de las conversaciones.En presencia de los integrantes del staff, el Gobierno activó una serie de medidas, entre ellas un canje de deuda en pesos que tuvo una adhesión del 64% y que le permitió al Ministerio de Economía estirar plazos de vencimiento para unos 14 billones de pesos que caían este año. En el mercado sobrevuela la noción de que ese canje podría tratarse de una acción previa (prior actions), que suelen ser medidas acordadas de antemano con el FMI antes de la puesta en marcha de un acuerdo nuevo.El staff técnico del Fondo Monetario permaneció durante el fin de semana con reuniones previstas con los funcionarios del equipo económicoTambién anunció un esquema de bajas temporales de derechos de exportación, con un costo fiscal de 800 millones de dólares, equivalente a algo menos de la mitad del superávit total alcanzado a lo largo de 2024. En febrero comenzará un crawling peg del tipo de cambio oficial más lento, de 1% mensual. No hubo novedades en las últimas dos reuniones de directorio del BCRA de un retoque en las tasas de interés, por lo que el Gobierno busca asegurar un margen amplio de carry trade para los inversores.La que comenzó el miércoles es la primera visita oficial del equipo del organismo en el marco de las negociaciones para un acuerdo nuevo. El Gobierno busca conseguir un préstamo de al menos USD 11.000 millones para recapitalizar el Banco Central y poder acelerar el desarme de los controles cambiarios.!function(e,n,i,s)}(document,”script”,”infogram-async”,”https://e.infogram.com/js/dist/embed-loader-min.js”);Fuentes que conocen el pensamiento de los técnicos del FMI aseguran que el diálogo entre el gobierno nacional y el organismo no tendrá mayores contratiempos en el esquema de metas y condicionalidades del nuevo programa pero que las discusiones están trabadas en otro aspecto: cuál será el esquema cambiario que adoptará el equipo económico durante el año. El tamaño y calendario de desembolsos dependerá, estiman las fuentes, de qué cambios a ese esquema puede comprometerse el equipo económico.El intercambio entre Buenos Aires y Washington tomó mayor intensidad en un contexto en el que el Gobierno busca un programa que garantice nuevos desembolsos para fortalecer las reservas del Banco Central. Una de las alternativas en análisis es destinar ese financiamiento a la cancelación de Letras Intransferibles emitidas por el Tesoro al Banco Central. Según declaraciones del presidente Javier Milei, el objetivo es solicitar al organismo un monto mínimo de USD 11.000 millones. El jefe de Estado también dijo que la negociación se centra no solo en el monto que tendrá la operación sino en la secuencia de los desembolsos. Además, aseguró que puede haber un acuerdo paralelo con inversores privados.En el mercado sobrevuela la noción de que ese canje podría tratarse de una acción previa (prior actions), que suelen ser medidas acordadas de antemano con el FMIUn informe de Adcap Grupo Financiero interpretó que “si bien anticipamos que no habrá condicionalidades estrictas sobre el régimen cambiario, las crecientes intervenciones del Banco Central tanto en el mercado de bonos como en el mercado cambiario oficial podrían fomentar las discusiones sobre el ‘dólar blend’, un programa destinado a impulsar las exportaciones agrícolas. Cabe destacar que el ‘dólar blend’ ha sido efecaz para impulsar las liquidaciones de exportaciones en los últimos tres meses. Sin embargo, este éxito ha tenido un costo para el Banco Central, ya que la oferta reducida en el mercado cambiario ocial ha limitado su capacidad para acumular reservas de divisas”, planteó el economista jefe Federico Fillipini.Desde Max Capital indicaron que “la visita de los directivos del FMI esta semana sugiere que un programa podría concretarse pronto, y creemos que el gobierno intentará cerrar un acuerdo entre marzo y abril. De ser exitoso, la primera revisión tendría lugar en junio/julio -con el cumplimiento de la meta de abril, usualmente redundante-, la segunda en septiembre/octubre -meta de julio-, y la siguiente después de diciembre”.En ese contexto, el primer día de febrero el Gobierno deberá afrontar un pago de casi USD 660 millones en concepto de intereses al Fondo Monetario. Será el primero de una serie de pagos de intereses que tendrán lugar a lo largo de 2025. A diferencia de los pagos de capital que se realizaron en 2024 -y que volverán al calendario de repago en septiembre de 2026-, los intereses no son cubiertos por desembolsos previos del FMI, por lo que deben ser pagados con reservas acumuladas por el Banco Central. En mayo habrá otros vencimientos por casi USD 630 millones, USD 500 millones más en agosto y otros USD 650 millones.