Dos de las participantes con personalidades más fuertes de esta edición de Gran Hermano son Sandra y Chiara, quienes en el mediodía del sábado protagonizaron una pelea a los gritos frente al resto de sus compañeros como testigos mudos de la explosiva discusión. La hija del exfutbolista Alejandro Mancuso arrancó confrontando a su compañera, la pescadora platense de 51 años, por el pedido que la joven le hizo a su padre para que la apoye en la placa positiva de nominados, que este domingo despedirá a los dos participantes que hayan acumulado el menor porcentaje.Lo que arrancó en una charla acalorada en la habitación fue tomando calor. “Nadie sabe si mis papás tienen mucha o poca plata”, argumentó Chiara, sobre el pedido que hizo a las cámaras para que su padre invierta dinero para asegurarse su estadía en el programa. El comentario no le gustó nada a Sandra: “Vos a tus 30 años te equivocás en hablar cosas privadas de tu familia”.“Es raro que otro pueda hablarlo, pero yo pueda joder con mis papás”, se excusó, mientras argumentaba que bromear sobre el poder del exjugador no habilitaba a que otros pudieran hacerlo. “No me subestimes en lo que yo puedo dar. No me subestimes porque la gente va a ver cómo soy realmente, ni por mi papá ni por nadie. Ir ahí es un poco cliché porque yo te dije que vine a Gran Hermano a mostrar otra cosa”, señaló, molesta. La jugadora más grande de las mujeres de la casa no se lo dejó pasar. “Tengo 51 años, no me vengas con boludeces. No sos el ombligo del mundo, ni de la casa, Chiara. Tenés que pensar cuando hablás conmigo. Te estás equivocando”, arrojó, mientras la otra se alejaba. “Yo soy más viva de lo que vos pensás”, lanzó. Unos minutos después, el segundo round tuvo lugar en la cocina y fue un verdadero griterío. “No me vengas a meter a mí en un quilombo que te conviene. No, mi amor. Andá a colgarte de las tetas de otro”, le dedicó la amiga/enemiga declarada de Petrona, en alusión a que necesita generar ruido para no quedarse afuera en la próxima gala de eliminación que será por partida doble. “¡Sos una mentirosa! Sos la primera que bardeás a todo el mundo por detrás”, rugió en otro momento. La otra jugadora, que estuvo enfrentada a Jenifer por el amor de Nano, tampoco se quedó callada. “Con el carácter que tengo, me voy a agarrar de tus tetas, boluda”, le gritó. “No me vengas a romper las pelotas, Chiara. No te tengo miedo”, redobló la apuesta su contrincante. “Es aburrido lo de tu papá. ¿Me venís a sacar un trapito al sol de hace un mes?“, continuó. Pero la promotora negó estar incentivando una pelea para no ser una “planta”, el nombre con el que denominan en el programa a aquellos participantes que son intrascendentes en el juego. “Te lo pregunté bien porque no me interesa que una persona esté hablando en la casa de mi papá. Yo jodí con mi familia. Por eso no hables y no jodas con mi familia. No hables. Y si me querés decir algo, decímelo en la cara. Cada persona que te viene a decir algo, que te viene a enfrentar, lo negás”, le recriminó. “Para mí mi papá es un tema delicado y todos lo saben porque lo dije un montón de veces. Entonces jugar con eso me parece que es tocar la vulnerabilidad de una persona. No quiero que hable nadie de mi papá diciendo que ‘la va a poner toda’. Primero, porque no saben cuánta plata tengo. Para empezar”, siguió, exaltada mientras Sandra tampoco daba el brazo a torcer. “Repetí lo que vos dijiste. ‘Por favor, papá, la remera firmada de mi papá’”, expresó, mientras la discusión se extendía por varios minutos más.