El Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha llegado este sábado a Kiev en la que será su quinta visita desde el comienzo de la invasión rusa del país, en febrero de 2022, y la última como jefe diplomático de la UE antes de que la ex primera ministra estonia, Kaja Kallas, le suceda en el cargo.”El respaldo de la Unión Europea a Ucrania ha sido una prioridad personal durante mi mandato y seguirá en lo más alto de la agenda europea”, ha hecho saber Borrell en un mensaje publicado en la red social X.Más tarde, ha pronunciado un discurso en el que ha señalado que “el fin claro de esta visita es subrayar el apoyo de la Unión Europea a Ucrania”, que ha cuantificado en 45.000 millones de dólares (unos 42.000 millones de euros).”Este apoyo es inquebrantable. Este apoyo es absolutamente necesario para que continuéis defendiéndoos de la agresión de Rusia. Y gracias por reconocer que esa ha sido mi prioridad personal desde el primer día de la invasión a gran escala”, ha afirmado tras reunirse con el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Andri Sibiha.Borrell ha destacado que han pasado 4.000 días desde el inicio de la “agresión” rusa, en 2014, y 1.000 días desde la invasión a gran escala. “Y hoy Ucrania y el pueblo ucraniano siguen siendo atacados por enjambres de drones y misiles lanzados contra objetivos civiles para aterrorizar a la población civil, al pueblo ucraniano”, ha denunciado.Así se ha referido a los ataques a la red eléctrica cuando se acerca el invierno. “La Rusia de (Vladimir) Putin quiere sumir a Ucrania en el frío y la oscuridad”, se ha lamentado.En respuesta, Ucrania debe tener “más apoyo militar, más capacidad de formación, más dinero, suministros y el permiso para atacar objetivos militares en su territorio”. “No basta con para las flechas; hay que atacar a los arqueros”, ha argumentado.Borrell ha mencionado la reciente prórroga durante dos años más de la Misión de Entrenamiento de la UE para Ucrania, que ha formado ya a 60.000 soldados ucranianos, una cifra que llegará a los 75.000 a finales de invierno. Igualmente se ha referido a la importancia de las sanciones para presionar a Rusia.El mandato de Borrell concluirá previsiblemente a finales de mes si el nuevo Ejecutivo de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, supera el examen de la Eurocámara a tiempo para asumir sus funciones el 1 de diciembre.Kallas sucederá a Borrell, si todo sale según lo esperado por Von der Leyen, en la culminación de un gesto hacia la familia liberal del Parlamento Europeo, que a excepción del Charles Michel como presidente del Consejo no había ostentado ningún ‘top job’ desde hacía dos décadas.