Cenas de empresa, reuniones familiares o de antiguos alumnos. El mes de diciembre es un mes especial, principalmente, por ser el mes en el que comienzan las ansiadas vacaciones de Navidad. Por otra, por ser una época de reencuentros con nuestros seres queridos. Pero, al tiempo que algunos se toman un descanso, la DGT ya ha avisado que en estas fechas desplegará más agentes en zonas comerciales y con ello habrá más controles para preservar la seguridad en las carreteras. En este sentido, es lógico que en estas fechas sea más fácil ‘toparte’ con un control de alcoholemia ante el incremento de desplazamientos.El abogado laborista Juanma Lorente, conocido en las redes como @juanmalorentelaborista, avisa que en este tipo de situaciones hay una cosa que “nunca debes hacer”: “Que no se te pase por la cabeza”, advierte. Lorente se refiere a negarte a hacer el control de alcoholemia, en el caso de que los agentes den el alto, “porque puedes acabar en la cárcel”. Las multas y el delito que estaríamos cometiendoEl especialista legal explica que el Código penal recoge penas de prisión desde seis meses hasta un año, además de privación del carnet de conducir. “Si te encuentras en esta situación, no te arriesgues y sopla. Por supuesto, si bebes no conduzcas”, sentencia. Según explican los expertos legales de Grupo Reclama, pueden imputarte un delito de desobediencia y delito contra la seguridad del tráfico.En las pasadas Navidades, la DGT registró cerca de 20 millones de desplazamientos, y para dar cobertura a todos estos desplazamientos, Tráfico preparó un operativo especial puso la máxima disponibilidad de sus medios humanos (Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, personal funcionario de los Centros de Gestión de Tráfico, patrullas de Helicópteros y personal encargado del mantenimiento de equipos y de la instalación de medidas en carretera).Cerca de la mitad de las muertes están relacionadas con el alcoholSegún el ministerio de Sanidad, de cada 100 accidentes mortales, entre 30 y 50 están relacionados con el alcohol. En España cada año mueren alrededor de 1.500 personas en accidentes de tráfico relacionados con el alcohol, y otras 50.000 resultan heridas, siendo la segunda causa de mortalidad en las carreteras, solo por detrás de las distracciones al volante. Según un informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF), en el 49,4% de las muertes en carretera en 2021 “se detectó presencia de alcohol, drogas o psicofármacos, aisladamente o en combinación”. El perfil de estos conductores realizado a partir de un análisis toxicológico de más de 1.000 víctimas mortales es de un hombre de 25 a 54 años, conductor de turismo o ciclomotor, que consume principalmente alcohol y, en segundo lugar, drogas. Entre los jóvenes de 18 a 34 años, los accidentes tuvieron lugar con más frecuencia los fines de semana y consumieron mayormente cannabis; en la franja de 35 a 65 años, la mayor incidencia se dio durante días de la semana y el consumo principal fue de cocaína.
