El Gobierno no se plantea la retirada del contingente español desplegado en Líbano en el marco de la Fuerza Interina de la ONU (FINUL), una decisión que sostiene que corresponde además a Naciones Unidas, y defiende la labor de mediación que está llevando a cabo en plena escalada entre Israel y el partido-milicia chií libanés Hezbolá en la frontera.
Así lo han trasladado este miércoles tanto el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, como la ministra de Defensa, Margarita Robles. Ambos hablaron la víspera con el máximo responsable de las misiones de paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, para discutir sobre la situación en el terreno, mientras que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hizo lo propio con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
En esa conversación, ha explicado Albares en entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, ambos coincidieron en que la FINUL, cuya misión es “evitar que se produzca un choque, un contacto, entre Hezbolá y el Ejército de Israel y que pueda haber una escalada bélica, sigue teniendo sentido a día de hoy” y que la presencia de los 10.000 ‘cascos azules’, entre los que hay más de 650 españoles, “sigue siendo importante para reducir ese riesgo de escalada bélica”.
Así las cosas, ha incidido en que “será el secretario general de Naciones Unidas quien tome la decisión, evidentemente en coordinación con todos los países que estamos en esa operación”, actualmente unos 50, y también teniendo en cuenta la opinión del comandante de la FINUL, el general español Aroldo Lázaro, que es quien mejor conoce la situación en el terreno.
En la misma línea se ha pronunciado Robles. “La decisión que se tenga que tomar en esta materia es una decisión que tiene que tomar Naciones Unidas”, ha sostenido en declaraciones en Antena 3 recogidas por Europa Press.
La titular de Defensa ha reiterado que el compromiso de España con esta misión de la ONU, en la que está presente desde sus inicios en 2006, es “total y absoluto” y ha recordado que se ha “traducido incluso en pérdidas de vidas humanas”.
Asimismo, ha salido en defensa de la actuación que están llevando a cabo los militares españoles, quienes “están dando un ejemplo de heroísmo”. “Es verdad que están en los búnkeres por razones de seguridad, que se han limitado las patrullas, pero siguen haciendo una labor de mediación muy importante” con el Ejército libanés y la población de la zona, ha reivindicado.
Así pues, ha remachado Robles, “España va a estar comprometida hasta que, en su caso, Naciones Unidas tome la decisión que estimen oportuno”.
Con todo, tanto la ministra de Defensa como el de Exteriores han confirmado que, al igual que con los españoles presentes en Líbano, también existe un plan de evacuación previsto por si fuera necesario sacarles del país.
“Ese escenario de evacuación está previsto en abstracto, pero en la teoría siguen en sus lugares y siguen haciendo esa labor que muchas veces no sale al exterior, pero que es una labor de apoyo y muchas veces de apoyo simbólico y psicológico a las poblaciones de la zona”, ha puntualizado Robles.
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