All Iron Ventures se transforma en Acurio Ventures y lanza su tercer fondo con 150 millones de euros

La gestora de fondos de ‘venture capital’ hasta ahora conocida como All Iron Ventures ha comunicado este lunes la reconversión de su marca al nombre Acurio Ventures, así como el lanzamiento de su tercer fondo con 150 millones de euros.

En un encuentro mantenido con los medios, el fundador y socio de la firma, Ander Michelena, ha situado la nueva identidad corporativa en el marco de la siguiente fase de desarrollo de la compañía, que se caracteriza por redoblar su apuesta internacional por Europa y duplicar los activos bajo gestión, hasta rondar los 300 millones de euros.

La elección del nombre de Acurio tiene su razón en la historia, tal y como explica Michelena, pues está inspirado en Juan de Acurio, quien fue contramaestre de Juan Sebastián Elcano en su aventura de llevar a cabo la primera circunnavegación al mundo en 1519.

En ese sentido, Michelena incide en que quieren ser el reflejo de ese marino por su espíritu emprendedor al hacer algo inédito; con vocación internacional -“¿Qué mayor aventura internacional que ir a dar la vuelta al mundo por el otro lado?”, se pregunta Michelena- y por permanecer en un segundo plano, sin necesidad de acaparar titulares como hizo Elcano en la Historia.

“Nosotros queremos ser ese Juan de Acurio de las empresas y que la gente se acuerde de las compañías, que son lo importante; que no hablen de nosotros, que no es importante”, resume el ejecutivo para apuntalar que esa es la vocación en el cambio de nombre.

Sobre el vehículo anunciado este lunes, denominado ‘Acurio Ventures III’ y que integra un fondo de capital riesgo y una sociedad de capital riesgo, Michelena ha explicado que es el tercer vehículo de la gestora con el foco en ‘startups’ y que en apenas once meses ha levantado 150 millones de euros, superando su tamaño objetivo de la mano de un centenar de inversores nacionales e internacionales.

En ese sentido, Michelena ha destacado que es la primera vez que dan acceso a inversores internacionales y que un inversor institucional estadounidense “muy prestigioso” -del que no ha trascendido el nombre por acuerdos de confidencialidad- ha entrado por primera vez mediante este vehículo en una firma española de ‘venture capital’.

A su lado, también figuran como partícipes del fondo hasta cinco fondos de pensiones, dos aseguradoras y unas tres docenas de ‘family offices’.

En lo referente a la operativa del vehículo, Michelena ha adelantado que ya han efectuado una veintena de inversiones, con compromisos por valor de 40 millones, y que otras cinco están próximas a llegar a buen puerto, en tanto que el fondo tiene su universo de inversión en ‘startups’ europeas en fases iniciales de desarrollo (entran a ellas mediante rondas ‘semilla’ y ‘serie A’) y con un enfoque generalista a nivel sectorial.

En un plano más amplio, el fondo tiene previsto articular su cartera de manera diversificada con hasta medio centenar de compañías y seguirá ejerciendo el rol de la casa: actuando como co-inversor con participaciones accionariales de entre el 3% y el 10% con la finalidad de dotarse de flexibilidad: “No tenemos necesidad de liderar rondas”, ha expuesto.

Con todo, Michelena reconoce que, a pesar de la diversidad por sectores que vertebran el fondo, sí que hay un denominador común: los buenos equipos y la eficiencia de capital.

“Nosotros nunca hemos roto ese mantra de 2018, siempre hemos dicho lo mismo”, ha reivindicado para recordar años como 2021 en los que el mercado se lanzó a invertir en grandes cantidades en pro del crecimiento y dejando de lado la rentabilidad.

Sobre esa manera de invertir con pequeñas participaciones, Michelena, que cifra en 300 el número de compañías que analizan cada semana, ahonda en que “compramos a un tamaño que también nos permite salir y deshacer posición si hace falta y sin necesidad de mandar un mensaje comprometido al mercado”.

Ligado a esto, la filosofía que vertebra la gestión del fondo en la coyuntura actual es la de que el mercado se encuentra en un momento complicado marcado por la caída de la actividad y que, por ello, consideran que es el momento de invertir: “Estamos acelerando cuando la mayoría del mercado está parado”, ha argumentado Michelena.

En esa línea, Michelena ha ahondado que la coyuntura actual más calmada del mercado está arrojando valoraciones atractivas de la compañías, en tanto que trae de vuelta a colación los hiperactivos años inmediatamente pos-pandémicos en los que las valoraciones subieron con fuerza.

Esa sensación de urgencia por aprovechar este momento se ve acelerada, además, por la premisa, según Michelena, de que el mercado de ‘venture capital’ se volverá a reactivar a finales de año y especialmente en 2025 de la mano de los recortes de los tipos de interés por parte de los bancos centrales; es decir, que los inversores se alejarán de bonos y activos similares para poner la vista en el apetito por el riesgo.

ELOGIO DE LA LEGISLACIÓN ESPAÑOLA

A propósito del entorno regulatorio, Michelena ha alabado la Ley de Startups aprobada en 2022 con el apoyo de casi todo el arco parlamentario, tanto en su elaboración como en su puesta a práctica: “Se habló con todo el mundo, se miró lo mejor que había afuera y yo creo que es un ejemplo de ley muy bien ejecutada”.

En ese sentido, ha apuntado que, con esta ley, “la legislación ahora no puede ser una excusa para que no haya emprendimiento en este país, porque es mentira que tengamos un problema de ley”.

SOBRE LA IA: “ESTAMOS UN MOMENTO TOTALMENTE PUNTO.COM”

Por otra parte, Michelena reseñó durante la comparecencia que el mercado se encuentra en el pico de sobreexcitación en torno a la Inteligencia Artificial (IA) y advirtió que habrá una corrección natural por la que sólo quedarán las entidades rentables.

En ese sentido, ha expresado mediante un símil que nos encontramos en “un momento totalmente punto.com”, en referencia a la burbuja tecnológica que pinchó a principios de siglo.

Con todo, a largo plazo ha aseverado que el impacto de la IA es innegable: “Va a mejorar la productividad masivamente; va a haber un antes y un después”, ha apuntado.

También en el apartado tecnológico, Michelena ha arremetido contra las criptodivisas, en las que no tienen inversiones y se declaran escépticos, al entender que son pura especulación y que no hay ningún valor detrás que las sustente.

Sin embargo, ha apuntado que la tecnología que avala las criptomonedas y su infraestructura sí pueden tener usos interesantes en otros ámbitos.

Fuente