La milicia proiraní Resistencia Islámica de Irak, un conglomerado de grupos armados chiíes, ha amenazado este domingo con escalar sus ataques en la región si Israel se decide finalmente a invadir Líbano para acabar con el partido-milicia chií libanés Hezbolá, con el que mantiene una serie de enfrentamientos en la frontera común a raíz del inicio del conflicto en la Franja de Gaza.
“El Comité de Coordinación de la Resistencia iraquí se ha reunido tras las amenazas del enemigo sionista-estadounidense de lanzar una guerra total contra Líbano y su valiente resistencia, y la coordinación ha decidido que si los sionistas cumplen su amenaza, el ritmo y la calidad de las operaciones contra ellos se intensificarán”, ha afirmado el grupo en un comunicado recogido por la cadena de televisión iraquí Al Sumaria.
En ese sentido, ha abierto las puertas a volver a realizar operaciones contra bases militares estadounidenses en Irak, a las que considerará como “objetivos legítimos” varios meses después de haber cesado los ataques contra las mismas.
De igual forma, ha mencionado el oleoducto que conecta la ciudad iraquí de Basora con la ciudad jornada de Aqaba, que “vacía a Irak de enormes sumas de dinero sin beneficio económico para el país”.
Este comunicado ha llegado una semana después de que milicia iraquí proiraní Kataib Sayid al Shuhada, integrante de la Resistencia Islámica, mostrase su disposición a unirse a Hezbolá.
La Resistencia Islámica de Irak, conformada principalmente por Kataib Hezbolá, Al Nujaba y Asaib Ahl al Haq, comenzaron a atacar bases estadounidenses en Siria e Irak al inicio de la guerra en Gaza, aunque cesaron sus actividades tras la muerte de varios militares estadounidenses tras una operación en Jordania. Después, comenzaron a realizar acciones contra posiciones israelíes y en las que se han llegado a coordinar con los rebeldes hutíes de Yemen.
El Ejército israelí y Hezbolá –respaldado por Irán y que cuenta con un importante peso político en Líbano– mantienen una serie de enfrentamientos desde el 8 de octubre, un día después de los ataques perpetrados por Hamás y otras facciones palestinas.
Las tensiones han ido al alza durante las últimas semanas y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió recientemente de que el Ejército israelí “está preparado para una acción muy poderosa” en la frontera con Líbano, mientras que el propio Ejército asegura tener ya un plan preparado para ello.
