escucharescucharLas historias más insólitas pueden recorrer el mundo a través de un clic y en cuestión de segundos, sobre todo si tienen un condimento extra de terror y suspenso, y la siguiente no es la excepción. Una turista robó unas piedras de las ruinas de Pompeya y como aseguró que le cayó una maldición, entró en desesperación y las devolvió.La mujer visitó el vasto sitio arqueológico, que antiguamente era una ciudad, ubicado en el sur de Italia, y se llevó tres rocas características del lugar. Sin embargo, sintió que algo andaba mal cuando al poco tiempo de sus vacaciones le diagnosticaron cáncer de mama y desde aquel entonces afirma que se trataría de una maldición.Pompeya, sur de Italia (Foto: istock)Ernst_LaursenSegún informó Mail Online, la mujer, de la cual no se reveló la identidad, envió un paquete que contenía tres piedras y una carta escrita en inglés. “No sabía nada de la maldición. No sabía que no debía tirar piedras. En un año, tuve cáncer de mama. Soy una mujer joven y sana, y los médicos dijeron que era ‘simplemente mala suerte’. Por favor, acepte mis disculpas y estas piezas”, expresó, antes de firmar el escrito con un “perdón”en italiano.Gabriel Zuchtriegel, director del parque arqueológico de Pompeya, compartió una imagen de la carta y los artefactos devueltos en X. “Estimado remitente anónimo de esta carta, las piedras pómez llegaron a Pompeya. Ahora buena suerte para tu futuro”, publicó.El mensaje que envió la mujer que devolvió las piedras (Foto: X/@GZuchtriegel)Pero esta no es la primera vez que una persona acusa que aquellas piedras son malditas. En 2020, Nicole, una mujer canadiense, envió un paquete que contenía dos mosaicos, partes de un ánfora, y una pieza de cerámica que había robado del mismo lugar a un agente de viajes de la ciudad italiana.Tras 15 años de mala suerte, Nicole decidió devolverlos. “Por favor, llévenlos de vuelta, traen mala suerte”, escribió y dijo que decidió robar esos elementos porque quería tener de recuerdo una parte de historia de algo que nadie más podía tener. “Tenían mucha energía negativa… vinculada a esa tierra de destrucción”, sostuvo.Además, también aseguró haber tenido cáncer de mama. “Ahora tengo 36 años y tuve cáncer de mama dos veces. La última vez terminó en una doble mastectomía. Mi familia y yo también tuvimos problemas económicos. Somos buenas personas y no quiero transmitir esta maldición a mi familia ni a mis hijos”, sostuvo.En ese sentido, Zuchtriegel dijo que habían recibido cientos de cartas de disculpa de turistas que habían robado artefactos del sitio antiguo, muchas de las cuales citaban una “maldición”.Con respecto a la mujer que recientemente devolvió las tres piedras, habló con RaiNews24 y dijo: “Hemos respondido a la señora que nos escribió porque su carta es muy conmovedora, pero lo recuerdo: robar bienes de sitios arqueológicos es un delito y debo informar de todo a las autoridades”.Pompeya, sur de Italia (Foto: istock)imagoDensEl directivo también añadió: “Muchas personas nos escriben sobre la supuesta maldición y nos cuentan las desgracias que han sufrido en el trabajo, en la enfermedad: son cosas conmovedoras y tristes. Muchos escriben devolviendo objetos robados cuando eran niños, son robos que ocurrieron hace décadas”.Además, el hombre afirmó que “no tiene sentido llevarse estos objetos” y, en cuanto a la vigilancia del lugar, señaló: “También controlamos el lugar con videovigilancia, pero es grande y podría suceder que roben algo”.LA NACIONSeguí leyendoSorpresa. Desentierran un templo griego donde los jóvenes realizaban llamativos rituales de iniciaciónNo apto para claustrofóbicos. Recorrió el interior de las pirámides de Egipto y causó escalofríos con lo que mostróSímbolo de estatus. Encontraron una espada vikinga en el fondo de un río congelado y un detalle impactó a todosTemasEn las redesOtras noticias de En las redes“Decidí defenderme”. Grabó cómo la despidieron de su trabajo en Estados Unidos y su reacción se volvió viralDefectuoso. La moneda de 25 centavos de dólar que puede valer hasta US$10.000 por un peculiar detalleEs su segundo intento. Un hombre de Texas demandó a Walmart y le reclama US$100 millones o compras ilimitadas de por vida