Cómo reconocer si una pareja es la adecuada: las ocho pruebas de un psicólogo especialista en terapia cognitiva

escucharescuchar¿Cómo saber si tu pareja es la adecuada? Con esa primera pregunta crucial, el psicólogo Walter Riso encabeza su último libro. Sólo faltaría el cartel de Advertencia, porque leer sus páginas puede derivar en una encrucijada. “De eso se trata”, dice entre risas el autor de De tanto amarte, me olvidé de mí.Para empezar, propone reflexionar sobre las ocho pruebas para saber si te aman de verdad o si estás con la pareja inadecuada. “Quise hacer un espacio de reflexión y creo que lo logré. Yo me he caracterizado, y así me conocen, por aplicar un realismo feroz”.Cuando todo parece girar alrededor del amor y de las relaciones, el psicólogo asegura que, para él, el amor no es el valor primordial. “La libertad, la justicia y la valentía son más importantes que el amor. El amor no es tan perfecto como dicen, y en lo terrenal es débil, necesita que lo ayudemos para que funcione. No hay que decir te amo, hay que decir te estoy amando”, agrega Riso, que se especializó en terapia cognitiva y obtuvo una maestría en Bioética.Al pensar que hay valores más importantes que el amor, cambia la perspectiva. “Se modifica la visión del mundo. Quiere decir que para mi autorrealización personal no necesito el amor. Son necesarias también otras cosas. Por eso, es genial cuando uno le puede decir a su pareja: tú eres lo mejor, pero no eres lo único. Necesito desarrollarme en otras áreas, tengo mi vocación”. View this post on Instagram A post shared by Walter Riso (@walter_riso)
Entonces, ¿qué parejas funcionan bien? Entre otras cosas, las que tienen territorialidad: “Tus libros, mis libros, nuestros libros. Tus amigos, mis amigos, nuestros amigos, que pueden estar parcialmente superpuestos. Siempre tienes que tener un espacio tuyo, exclusivo, porque hay lugares que no han sido construidos para dos”.Pero, ¿qué pasa cuando la construcción no es equilibrada, cuando en la pareja aparece un vínculo de sumisión-dominación, cuando el trastorno de dependencia y de adicción trastoca la pareja?“Si hay un trastorno de apego, de adicción o de love addiction, no se procesa bien la información, entonces se tiende a sobrevalorar al otro. Es como si se estuviera en una etapa de enamoramiento continua, en el que se idealiza al otro, se exagera lo bueno y predomina el miedo al abandono, a perder a su pareja”.“Si tu alegría no le alegra, si tu sufrimiento no le llega, si tus preocupaciones no le inmutan, busca a alguien con quien poder compartir tus sentimientos de manera completa y natural”, dice Riso ShutterstockEl apego, la adicción a una pareja, es la otra cara del miedo. Aunque el miedo es normal y aceptable mientras uno no negocie con sus principios. Si existe esta negociación, se corrompe el vínculo.El proceso para sanar esos trastornos puede implicar, en muchos casos, terminar con la relación, lo que para Riso puede doler “un poquito”, insinúa, para luego aclarar que, por la experiencia que ha visto en clínica, “no mucho”.“La gente piensa que será peor, pero si tiene un trastorno de dependencia y de adicción sufrirá más si sostiene la pareja”. Cuando uno toma conciencia de eso, y decide terminar, el bienestar no se dará de un momento al otro, aclara. “No es tan fácil, pero tampoco es fácil formar una familia, criar hijos o hacer una carrera”. View this post on Instagram A post shared by Walter Riso (@walter_riso)
En la primera parte de su libro, De tanto amarte, me olvidé de mí (Planeta), Riso plantea algunas pruebas para saber si te aman de verdad o estás con la pareja adecuada. ¿Están preparados?PRIMERA PRUEBASi pudieras viajar al pasado sabiendo cómo es hoy tu relación de pareja y cómo ha sido, ¿volverías a repetir lo vivido con él o con ella?Antes de contestar, en autor analiza otras preguntas: ¿Has crecido junto al amor de tu vida o has ido para atrás? ¿Repetirías? ¿Volverías a recorrer los mismos pasos sin deshacerlos? Quizás sí, dice. Hay relaciones que no son perfectas, pero que han logrado mantener un lazo sostenido en el que, pese a los problemas, lo esencial del amor nunca se perdió. O quizá no.“Si respondes un sí contundente a repetir, sin autoengaños de ningún tipo, con el corazón en la mano, entonces estás bien, muy bien. Si respondes un NO contundente, entonces debes tener claro que llegó la hora de reinventarte en el amor; que te equivocaste. Pero no confundas amor con un fracaso. Y si no eres capaz de decidir, esta confusión también genera información relevante”.SEGUNDA PRUEBA¿Querrías a una persona como tu pareja para tu hija o hijo?“Esta indagación es determinante. Te cuestionará fuertemente, porque tu análisis pondrá en juego, aunque solo sea de manera virtual, el bienestar de las personas que más amas”, analiza Riso.Y vuelve a repreguntar: ¿Por qué entonces sí es buena para ti? ¿Te equivocaste? ¿Sientes que es tarde? ¿Piensas “más vale malo conocido…”?TERCERA PRUEBA¿Por qué no debería quererte?El especialista recomienda que, para analizarlo, es necesario tomar una hoja de papel y, en un lugar relajado y sin interferencias, preguntarse en voz alta: ¿Hay motivos por los cuales sería conveniente alejarme de ti?Además de una pregunta clave: si vieras a otra persona con una relación como la tuya, ¿qué le aconsejarías? “Ten en cuenta si aquellos problemas que tuvieron se resolvieron de verdad o quedaron bajo la alfombra. La idea no es que pongas cosas intrascendentes en la hoja. Hay desacuerdos normales y necesarios que no afectan al funcionamiento de una pareja”.CUARTA PRUEBADe quién estás enamorada o enamorado, ¿de tu pareja como es hoy o de como era antes?Sin vueltas, Riso es contundente: “¿A quién amas? Si la respuesta es que amas a la pareja de los primeros tiempos y no a la actual, ¿qué diablos haces ahí? El amor es más funcional bajo los auspicios del realismo y lejos del autoengaño. Aterriza en el aquí y el ahora. No confundas lo que es con lo que fue. ¿Puede haber un cambio y que Lázaro resucite? No lo he visto en mi experiencia clínica, aunque si creemos en los milagros, todo es posible”.QUINTA PRUEBASi te mostraras tal cual eres, sin máscaras ni mecanismos de defensa, al desnudo, con tus vulnerabilidades totalmente expuestas, ¿piensas que la persona que amas se aprovecharía de ti?En este caso, Riso hace una diferenciación de lo que sucede en la etapa del enamoramiento, y en la posterior, cuando la pareja ya está conformada. “El «mercadeo afectivo» y los rituales de conquista requieren un espacio de aproximaciones sucesivas. Tanteos, anticipaciones, ajustes y exámenes de corto plazo. Si lo sacas todo de golpe y sin recato, es posible que la otra persona se asuste. Tus virtudes le encantarán, pero tus vacilaciones o inseguridades no le gustarán ni un pelo, ya que aún no siente nada por ti. ¿Para qué exponerte entonces? Esta prueba es para tu pareja estable cuando dudes si te ama, no para una noche de aventuras y tampoco si decides salir a “cazar” un futuro marido o esposa”.SEXTA PRUEBA¿Se alegra cuando te alegras, sufre cuando sufres, se conmueve con tus problemas?El intercambio emocional, la empatía y la comunicación afectiva con la persona que se ama son determinantes para que el amor se consolide y crezca. “Si tu alegría no le alegra, si tu sufrimiento no le llega, si tus preocupaciones no le inmutan, busca a alguien con quien poder compartir tus sentimientos de manera completa y natural”, dice Riso categóricamente.SÉPTIMA PRUEBA¿Tienes la total certeza de que tu pareja no te hará daño intencionalmente?En necesario comenzar con un ejercicio de memoria para luego observar el comportamiento de una pareja. “Trata de recordar y ubicar en el tiempo si la persona a la que amas te ha hecho daño intencionadamente, es decir, y lo enfatizo: a propósito. Esto significa que tu pareja, a sabiendas de que te lastimaba, ya sea física o emocionalmente, te hizo daño.Hay cosas obviamente más sutiles, como callarte en público, menospreciar tus logros, coquetear con alguien en tu presencia, ignorarte…. Aunque la ignorancia podría excusar a veces el daño producido, por ejemplo, decir: «No sabía que te sentirías mal», la disculpa no es suficiente.Conclusión: revisa en tu memoria, no te quedes a ser un espectador o una espectadora de tu propia destrucción. Si lo haces, serás cómplice de tu verdugo.OCTAVA PRUEBA¿A veces tienes que disculparte por algo que no has hecho para que él o ella de calme?Es, para Riso, el paradigma de la sumisión: calmar al depredador, al coste que sea, incluso autolesionándose psicológicamente. “Pedir perdón por alguna cosa que no has hecho, mentirte a ti mismo o a ti misma para que tu pareja esté tranquila es subyugación de la peor. Es someterte a un poder que exige que asumas una culpa que no tienes, para que te deje en paz o te acepte. Muchas personas empiezan inculpándose para desactivar la ira de su pareja y con el tiempo se convierte en costumbre y se esclavizan en una práctica degradante.“Con esta prueba, lo que pretendo es ver hasta dónde eres capaz de anular tu ser, tu voluntad de existir, para complacer a tu pareja. Y si eso ocurre y el otro lo acepta, no te ama nada ni te amas nada”, agrega.Ocho pruebas para responder sin auto engañarse. Porque, como concluye el especialista: ser fiel a uno mismo -a una misma- es la mayor de las fidelidades.Mariangeles Lopez SalonTemasConversacionesparejaConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectOtras noticias de Conversaciones¿Son lámparas? Las originales obras patagónicas que llegaron a Europa e impresionaron a Louis VuittonAl filo del abismo. 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