Se perdió el viaje de egresados y dio con un entrenador poco convencional para cumplir un sueño de la infancia: “No me arrepiento”

>LA NACION>LifestyleDesde pequeño, su conexión con la bicicleta fue especial y luchó por destacarse en el alto rendimiento.26 de mayo de 202203:25Jimena BarrionuevoPARA LA NACIONCorría 2010 cuando Agustín Duran vio pasar delante de sus ojos y en cuestión de segundos el futuro que buscaba para él. Tenía tan solo doce años y se había animado a competir nacionalmente en la categoría infantil de circuitos cortos sobre su querida bicicleta, que lo había acompañado desde los primeros años de vida. El torneo se había realizado en Santa María, provincia de Catamarca.“El que ganó en infantiles me sacó una vuelta. Fue un shock para mí. Además, en ese torneo estaba también un chico que se llamaba Catriel Soto, que tendría alrededor de 25 años en ese momento y corría en la elite. Yo lo veía como a alguien de otro planeta. ¡Era imposible que pedaleara tan rápido!¿Qué se sentirá ir a esa velocidad en una bicicleta? ¿Llegare algún día andar como el?, me preguntaba mientras lo miraba a lo lejos”.A LOS 60: EL RECONOCIDO JINETE QUE POSTERGÓ A LOS CABALLOS POR LA BOTONERA FAMILIAR: “HABÍA COLAS DE 30 PERSONAS Y 12 EMPLEADOS EN EL MOSTRADOR”Agustín ya sobre la bicicleta desde pequeñoPerderse el viaje de egresados… por cumplir un sueñoCriado en la localidad de Chilecito, al oeste de la provincia de La Rioja, Agustín estuvo vinculado desde temprana edad con la práctica del deporte. Jugó al fútbol, al básquet, al tenis, hizo natación, se sacó un tiempo las ganas con el rugby pero, poco a poco, se fue inclinando por el ciclismo, que era la disciplina que más lo motivaba. Además, Chilecito, lleno de montañas, senderos y buen clima la mayor parte del año, se presentaba como un escenario ideal para hacer mountain bike.Para perseguir su objetivo, Agustín tuvo que dejar diversas actividades y divertimentos propios de la adolescencia. Por ejemplo, no fue de viaje de egresados y estuvo a punto de perder su último año de secundario ya que los entrenamientos en su provincia y las competencias en Europa le demandaban muchísimo tiempo y esfuerzo. Ese año tan particular también tuvo el privilegio de participar en los Juegos Olímpicos de la Juventud.“Estaba enfocado solo y exclusivamente en eso. Pero no fue algo que haya sufrido. Es más, esperaba con ansias que llegara el fin de semana porque sabia que a algún lado tenia que viajar. Eso era lo mas lindo: conocer lugares, culturas diferentes y pasar momentos especiales sobre la bicicleta. Sin duda alguna, no me arrepiento de perderme esa etapa de mi vida por dedicarme a deporte”.”No me arrepiento de haber perdido el viaje de egresados”“Siempre ha sido un luchador”La actitud y el compromiso de Agustín son dos características que lo destacan como deportista. “Siempre ha sido un tremendo luchador. Sus rivales, que en muchos casos son amigos también, lo saben, y entienden que para vencerlo tienen que dejar la piel literalmente”, dice Facundo Ahumada, su actual entrenador. “Esto lo observaron quienes lo evaluaron también en la Unión Ciclista Internacional (UCI), la asociación de federaciones nacionales de ciclismo que fue creada ya en 1900, en París, Francia, y es algo súper valioso”.Gracias a su constancia y dedicación, Agustín pudo viajar y entrenar en diferentes oportunidades en el Centro Mundial de Ciclismo de la Unión Ciclista Internacional (UCI) en Suiza. Allí hizo trabajos puntuales, convivió con chicos de todo el mundo y compitió a altísimo nivel. “De esas experiencias aprendí muchísimo. Además de las buenas amistades que hice a lo largo de los años con el deporte y la cantidad de lugares que conocí alrededor del mundo, no creo que hubiera tenido la posibilidad de haber vivido todas estas situaciones si no fuera por el ciclismo”.Agustín tiene tres títulos argentino en XCO y es subcampeón PanamericanoUn entrenador poco convencionalAgustín proviene de familia de deportistas, puntualmente de ciclistas. Tanto su padre como su hermano compiten y a excelente nivel. Eso no es todo. En 2019, luego de haber sido campeón argentino junior en XCO -ciclismo de montaña- Agustín tuvo una caída importante en su rendimiento. Sin embargo, ese altibajo no lo desanimó y siguió luchando. “Creo que esa experiencia le permite estar hoy a gran nivel luchando como uno de los mejores ciclistas de Argentina con proyección internacional”, asegura Ahumada.Si bien Ahumada es licenciado en Educación Física por la Universidad de Catamarca, fue su segunda carrera, la licenciatura en Química, la que le abrió la mente hacia nuevas posibilidades de entrenamiento para los atletas de alto rendimiento. Fue casi por accidente que dio con un grupo de investigación que estudiaba biosensores (sensores que funcionan con una enzima como las que tenemos en nuestro organismo), y mediciones de lactato, un combustible clave en el organismo, como la glucosa en deportistas.Agustín entrena con Facundo Ahumada, un entrenador que experimenta con diferentes técnicas y recursos en el alto rendimiento“Desde siempre estuve ligado al entrenamiento porque siempre fue lo que me apasionó. A partir de 2010 fui dedicando cada vez más energía al entrenamiento, y en 2015 fundé mi plataforma específica sobre entrenamiento en deportes de resistencia. Dos años después logró que un grupo de expertos en tecnología se pusieran a trabajar conmigo desarrollando la herramienta para el control del entrenamiento”, relata Ahumada.En 2016 recibió una invitación de la Federación Argentina de Ciclismo de Montaña para sumarse como entrenador. Eso le dio una oportunidad de trabajar con ciclistas de un nivel alto como Joaquín Plomer, que ha estado luchando para pasar al ciclismo profesional, y en este momento, Agustín Durán.Facundo AhumadaPara lograr sus objetivos, Durán y Ahumada trabajan en equipo. Un día normal de entrenamiento consiste en cinco horas de actividad que combinan ciclismo de ruta, de montaña, trabajos de fuerza específicos y trotes. Agustín no se detiene nunca: también cursa el segundo año de la licenciatura en Administración de Empresas y por la tarde atiende en el local de ciclismo familiar.Solo quienes se encuentran en los más altos niveles lo saben. “Es muy difícil ser deportista de alto rendimiento. Es sumamente sacrificado. Pero si tenés pasión y te gusta, no hay nada más lindo que ponerte un objetivo e ir inalcanzablemente detrás de ese sueño. El camino solo se va armando y se van abriendo puertas”. Este año es el último de Agustín en la categoría Sub-23 (actualmente tiene 22 años) y su sueño es estar en unos Juegos Olímpicos. “Tengo la esperanza de que sea en París 2024″.Compartí tu experienciaSi viviste alguna experiencia que mejoró tu bienestar y calidad de vida (puede ser médica, alimenticia, deportiva, un viaje, sentimental, profesional o de otra índole), y querés compartirla en esta columna, escribí a [email protected] BarrionuevoSeguí leyendoVivir en Lisboa. El lugar con facilidades para el inmigrante: “Los argentinos venimos con tantos problemas que nada nos parece tan grave”Lo vieron en Netflix. Viajaron para entrenar con “el hombre de hielo” y nadaron en aguas heladas para desbloquear emocionesConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectTemasBienestarTodo es historiaMás notas de BienestarHistorias. Es fotógrafo, nació con deformaciones faciales y encontró una terapia para sanarDescanso. ¿Cómo podemos dejar de roncar?Equilibrio. Cómo sacarle el jugo al trabajo híbrido: claves para organizar cada día y vivir mejor

Fuente